Biografía de la obra
En esta exposición, presentada en Galería Gabriela Mistral, el artista vuelve a utilizar los trípodes Manfrotto que pudo recuperar de la instalación El padre de la Patria, presentada en la Bienal de La Habana en 1994, estructura fundamental que marca cada una de las catorce estaciones del vía crucis, desde donde se proyectan figuras retóricas del lenguaje, a través de un sistema que hace oscilar la imagen, y por otra parte proyecta un as de luz sobre los números romanos que enumeran las estaciones. Estos números fueron realizados en Broncerías Chile. Frente a cada trípode, directamente en el muro el artista instaló una marina realizada al óleo sobre una placa de trupán, cuya línea de horizonte va subiendo aproximadamente un centímetro entre cada una y un túnel hecho en yeso y pintado también al óleo, los cuales están conectados por una repisa curva sobre la cual se desplaza un barco de hojalata de color negro. La instalación determinó que el artista solicitara a la galería modificar el ancho del vano de la puerta, enangostándolo a 40 cm., para generar una dificultad en el acceso a la sala. El nombre de la obra y de la exposición hace referencia a los cuatro saberes o ciencias: geometría, música, astronomía y aritmética. Y su bajada en latin refiere a lo hecho para el aprendizaje de los niños. Esto se conecta con el libro escolar que "enseña cosas", el cual lo inspiró para esta obra. (Gonzalo Díaz, entrevista 21 del diciembre de 2023)
En la entrevista realizada a Gonzalo Díaz el 20 de abril de 2024, el artista vuelve a hacer referencia a la modificación del acceso a esta obra comentando lo siguiente: "Lo de las puertas estrechadas tenía el sentido de, uno, dejar el espacio de exhibición como si fuera de ultratumba, de capilla, espacio reservado. Y la otra cosa que yo tenía en cuenta para el estrechamiento de la puerta era que al espectador le costara entrar, es decir que percibiera que pasaba de la calle a la obra. Que los bordes de la entrada le rozaran los brazos o que tuviera que ponerse de lado, que es lo que la gente hace cuando la entrada tiene 40 cm. Hay un acto de entrar. Obliga a concientizar el acto de entrar".
La obra Quadrivium es seleccionada por el curador Camilo Yañez para formar parte de la gran exposición inaugural del Centro Nacional de Arte Contemporáneo de Cerrillos, perteneciente al Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. Junto a Gonzalo Díaz, se presentan obras de José Balmes, Jorge Tacla, Cecilia Vicuña, Juan Luis Martínez, Ivan Navarro, entre muchos otros, cuyas obras tienen la palabra como protagonista.
Para la presentación de Quadrivium en el Centro Nacional de Arte Contemporáneo de Cerrillos, Gonzalo Díaz solicita nuevamente enangostar el vano del acceso a la sala, al igual como lo había hecho años antes en Galería Gabriela Mistral. Para esta exposición decide pintar nuevas marinas y le solicita al padre del artista Pablo Ferrer, que colaborara con la fabricación de un circuito especial como sistema de oscilación de las palabras proyectadas sobre el muro. Vuelve a utilizar los trípodes Manfrotto y los números romanos realizados en bronce fundido por Broncerías Chile. La obra fue desinstalada antes del cierre de la exposición, debido al ma manejo de la mantención de la obra, lo que generaba desajustes en la obra que no eran subsanados oportunamente. La idea era que la obra quedara de manera permanente en el Centro de Arte Contemporáneo, pero al final no fue posible. Se invirtió mucho dinero en cambiar ciertas piezas para que duraran mucho, pero al final terminó guardada en la bodega.